Nueva exposición de la mano de Gema Atoche, en la que conduce al espectador a través de paisajes, retratos y naturalezas muertas en una búsqueda de sentido. La artista expone en este caso un proyecto en el que la pintura, el dibujo y el grabado se alían en una búsqueda obsesiva de lo real. De esta manera, pone en juego sus excepcionales cualidades para el dibujo y el grabado, su irrefrenable tendencia a la abstracción y su don para dotar de espíritu al color.