Pinturas de Ramón David Morales.
Sus obras poseen un vector autobiográfico cuyas referencias al mundo rural y a los ciclos de la naturaleza se colmatan con carencias y enseres que son habituales en su entorno.
La geometría se hace fuerte en la distribución angular de las formas y el autor se decanta por invariantes en las que la luz crea formas que dan cuerpo al mobiliario -sillas y mesas- y los libros.