Entre 1931 y 1936 cerca de 7000 pueblos y aldeas de España recibieron a grupos de jóvenes que llegaban de la ciudad cargados de libros y música, museos y cines ambulantes. Son las Misiones Pedagógicas.
«La poesía les produce un extraño respeto, traducido en el silencio más hondo de la sesión; acompañan a la música con movimientos de cabeza, se unen inmediatamente a ella; el cine desata el chorro de los comentarios; todos hablan y todos imponen silencio»