Precediendo a la Cuaresma, la celebración de esta fiesta pagana es aprovechada por las comparsas para motivarse en la elaboración de los disfraces más ingeniosos; y salir a la calle para cantarnos en forma de chirigota lo más relevante que aconteció en el pueblo ese año. Desbordante de frenesí es el pasacalles que culmina, lleno de colorido, por la carretera principal de la playa.
Finaliza el miércoles 22 con el tradicional Entierro de la Sardina: miércoles de ceniza. Una vez acabado el carnaval y como preámbulo de la Semana Santa, se celebra esta fiesta, que simboliza el paso de lo carnal a lo espiritual. Una vez oficiada la misa por un cura ficticio, se pasa a la quema de la sardina (elaborada de cartón piedra). Dando luz y calor a las oscuras noches de invierno.
Actividades:
Viernes 17 de febrero:
Sábado 18 de febrero:
Miércoles 22 de febrero: