La fiesta primaveral por excelencia en Cuevas de Almanzora.

Sus orígenes hay que situarlos a mediados del siglo XVII cuando la comunidad de franciscanos decidió establecer un día de convivencia con los feligreses más allá de los muros del templo.

En la Rambla de Cirera se comenzó a celebrar una merienda colectiva el jueves que mediaba la cuaresma.

No falta nunca la tortilla de patatas, las torticas de bacalaos, el arroz con leche, los hornazos, los dulces semejantes al rosco de Pascua navideño... Aunque la protagonista de la fiesta es LA VIEJA, un muñezo de papel relleno de caramelos y chucherías. Se la coloca en un sitio preferente durante el día para que todos puedan verla y al caer la noche le llega su Sanmartín...