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Con una duración que oscila entre los 5 y los 4 días es la fiesta más emotiva de este pueblo con una gran devoción por Santa Ana y San Joaquín, abuelos de Jesucristo. Los actos se desarrollan durante todo el mes de julio, celebrándose competiciones deportivas de fútbol, voley-playa, natación... La feria en sí suele dar comienzo el 23 de julio, con la comida de las personas de la tercera edad, que llevan a sus nietos a los 'cacharritos' que ese día estarán a mitad de precio. el 24 de julio se procede a la inauguración de las casetas y del alumbrado y a la lectura del pregón haciendo una especial mención a aquellas personas que emigraron en su día y vuelven a su pueblo durante estas fiestas. El 25 de julio es un día especial, pues a partir de las 12 de la noche es el día de los patronos y numerosos cohetes y besos de felicitación a las muchas Anas y Joaquines del pueblo dan cuenta de ello. Esa noche todo el pueblo se queda despierto en la feria esperando hasta las 7 de la mañana, cuando empieza el pasacalles a cargo de una agrupación musical ecijana y los famosos y conocidos 'pelotazos' que ya se han convertido en tradición y que consiste en que los jóvenes del pueblo, y no tan jóvenes, después de haber pasado una noche de celebración se dedican al cachondeo tirándose balonazos al son de paquito chocolatero y del repique de campanas. Después del tercer cohete, comienza el encierro de dos vaquillas, y hasta aproximadamente las 12 del mediodía los carrosaleños recortan a estas vaquillas, sin incidentes mayores ni maltrato animal. Este 26 de julio a las 9 de la noche comienza la procesión de Santa Ana y san Joaquín, a la que todo el pueblo acude. Esta procesión es sumamente emotiva para el carrosaleño. Normalmente el 27 de julio, Cañada pone fin a sus fiestas con un espectacular castillo de fuegos artificiales.
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