Es el primero de agosto el día grande de la "Fiesta de La Víncula", en el transcurso del cual se honra al santo con diversos actos que culminan en la noche con una solemne procesión. Por la mañana tiene lugar una diana musical floreada en la que las autoridades, con el alcalde al frente, invitan a los vecinos a participar en los actos del patrón. La comitiva irá recogiendo a los diferentes hermanos y cofrades y el hermano mayor invitará a todos los que componen el cortejo a un desayuno. Tradicional es también que ese día se suelten vaquillas, costumbre ésta que se ve abocada a desaparecer ante los cada vez mayores trámites y requerimientos administrativos necesarios para llevar a cabo este tipo de manifestaciones taurinas, no sin la resistencia de los más jóvenes, que reivindican de distintas maneras que no se pierda la tradición de correr las vaquillas de "La Víncula"