La imagen de la Virgen de la Cabeza es trasladada por una carreta de yunta de bueyes hasta la ermita en la Sierra Los Judíos.
Acompañada por todos los romeros, allí se celebra una misa, pasando el sábado en plena convivencia familiar y amistosa para regresar por la tarde del domingo a Priego, acompañada por la comitiva.