Frente a los Pinares de Los Manantiales se congregan, cada año, casi 200.000 personas dispuestas a peregrinar hasta la Ermita en un ambiente festivo de alegría y bailes. Decenas de carretas, algunas tiradas por bueyes, se juntan para participar y lograr el premio que se otorga a la carreta mejor adornada.
Unos días después de la Romería, comienza la popular Feria de San Miguel en la que la gente se echa a las calles en una de las más conocidas fiestas de la provincia. Durante el día, los torremolinenses y visitantes se concentran en el centro de la ciudad para compartir la música, la bebida y la comida, y acto seguido, enganchar con la feria de noche en el Real, que se monta en la Explanada de San Miguel.