XXII FESTIVAL DE JEREZ
CON-SECUENCIA
Alfonso Losa es más que un bailaor. Maestro de maestros y respetado por toda la profesión dancística por sus extraordinarias facultades y su gran talento coreográfico, Alfonso Losa es un artista de culto. Su baile ha inspirado a los más grandes (Manuela Carrasco, Farruquito, Morente, Tomatito, Niño Josele, etc.) que le han reclamado para sus espectáculos. Tras seis montajes propios y cuatro más en colaboración con otros bailaores -y en plena madurez artística y creativa- Alfonso Losa da un nuevo paso en su carrera: con-secuenciA.
En con-secuenciA Alfonso Losa aborda sin ambages la dialéctica entre el respeto a los cánones esenciales y la necesidad de articular nuevos lenguajes: esa es su investigación. En una serie de actos o “secuencias”, el bailaor y coreógrafo parte de diferentes motivaciones para ir generando atmósferas con distintos estados de energía.
Una de esas motivaciones es la danza flamenca contemporánea de la que Rocío Molina es, para Alfonso Losa, una de sus principales artífices. La bailaora malagueña ha grabado para este montaje una pieza especial que servirá a Losa como punto de partida para su particular investigación sobre los nuevos códigos dancísticos en el flamenco. La admiración mutua entre estos dos artistas viene de años atrás.
En con-secuenciA Alfonso Losa reflexiona sobre la evolución del arte. La dialéctica entre el respeto a los cánones esenciales y la necesidad de articular nuevos lenguajes es especialmente comprometida en artistas que, como es su caso, creen firmemente en ambos postulados. En este montaje Alfonso Losa plantea una serie de actos (secuencias) en los que expone diversas dimensiones de esa dinámica, diferentes motivaciones como la validez de los principios estéticos clásicos, las influencias de la contemporaneidad o el papel del artista como elemento generador de mensajes: con sus conocimientos, sus inseguridades, sus cargas y sus capacidades procesadoras.
Con-secuenciA no es una propuesta finalista: no se trata de un catálogo de conclusiones sino una vía de crecimiento. Apoyándose en unas estructuras básicas -y con unos colaboradores muy especiales-, el artista se plantea cada secuencia como un reto creativo basado en uno de sus conceptos más trabajados: la improvisación.