Con Lucía Fumero
Canción contemporánea, jazz y folclore a ritmo mediterráneo con el corazón puesto en América Latina. Les acompañarán en directo los visuales analógicos de Liquid Sky y una charla, al término de los conciertos, con el fundador del sello DISPAR, Alejandro Lévar.
MIXTURA es un ciclo de conciertos y charlas comisariado por el sello malagueño DISPAR para La Térmica en colaboración con Málaga de Festival (MaF). En cada encuentro, artistas locales y visitantes exploran territorios comunes en torno a la música y la palabra. MIXTURA tiene lugar una vez al mes en la Sala 005 de La Térmica, una sala multidisciplinar reconvertida en espacio escénico gracias a su acústica y dimensiones idóneas para provocar encuentros de cercanía entre público y artistas. Punto de encuentro, actuaciones y debates – música de cámara para el siglo XXI.
ALICIA TAMARIZ
Alicia Tamariz se expresa a través de las metáforas, de la poesía, de los símbolos. Le encanta mirar en las profundidades, y gozar de los placeres. En 2021 saca su primer disco, “Aletheia”, en formato de sexteto de jazz – un trabajo de transformación, desnudez y sanación, de desbloquear los miedos y encontrar la belleza de lo verdadero. Después se han seguido tejiendo canciones. Unas instrumentales, otras apalabradas. Cantar, qué gran regalo. El Piano, el mejor amante. La Guitarra, la mejor compañera. Y, si os lo habéis preguntado, sí, su padre es Juan Tamariz.
NICO ROIG (con Lucia Fumero)
A Nico Roig le gusta definirse como “cantautor de protesta psicológica”. Su nuevo disco, “Esto frío no vale nada” (Foehn Records, 2023), es una exploración libre de distintas músicas tradicionales de todo el mundo, un conjunto de canciones luminosas y alegres, fruto del encuentro con grandes artistas de la escena folclórica o el jazz como Sílvia Pérez Cruz, Rita Payés, Lucia Fumero, o Juan Rodríguez Berbín.
LIQUID SKY ANALOGIC
Liquid Sky Analogic es un colectivo malagueño formado por los artistas visuales Jorge Luque, Javier López y Nuria Luque. Durante más de una década en activo han mantenido un compromiso claro con adaptar los “liquid light show” a los tiempos modernos, usando formatos analógicos de proyección en tiempo real, proyectores de diapositivas, retroproyectores, así como incorporando el uso de cámaras para generar diferentes espacios visuales a través de la experimentación óptico-lumínica, que inducen al espectador a un estado casi hipnótico.