FESTIVAL DE GRANADA.
La fuerza de la ternura
Todavía resuenan los melismas de este cantaor chiclanero en las murallas de la Alhambra que fueron testigo de su participación en el centenario del Concurso de 1922. Todavía recuerda la afición sus maneras de retraer los cantes para exprimir la esencia del gusto, la esencia del jondismo, la esencia de su legado gaditano. Por eso su espectáculo se llama así: Esencia. Antonio Reyes, cantaor premiado con las más altas distinciones del Concurso Nacional de Córdoba y el sumo galardón del corazón de los aficionados más exigentes, se presenta con un formato íntimo en el marco incomparable de La Chumbera, arropado por la ‘sonanta’ del jerezano Pepe del Morao, sobrino de Manuel Morao y Moraíto Chico, y último baluarte de esta saga tocaora que forma parte ya de la mejor historia del flamenco.