Uno de los festivales más originales de la provincia de Cádiz, el Ecstatic Arts, sobrevive a la pandemia y vuelve a celebrarse, tras dos años parón. 

El Festival ofrece 15 actuaciones musicales, más de 40 talleres y 7 sesiones de Ecstatics Dance, en un entorno propicio para disfrutar de la naturaleza y que cuenta con  zona de terapias, mercadillos, artesanía y restauración. 

La programación se desarrolla en cuatro espacios diferenciados. Por un lado, la zona de ‘Unidad’, tema al que se dedica el festival, donde participan seis colectivos que representan a otras tantas ciudades que traen a sus propios artistas y facilitadores. Por otro lado, la segunda zona se denomina ‘Cuerpo y movimiento’, dedicada a la exploración de uno mismo a través de diferentes talleres, clases de yoga, meditación y movimiento. La tercera zona se llama ‘Contacto’, enfocada a las relaciones de pareja, tantra y masajes. Y por último la zona ‘Minifest’, para los más pequeños, con su propia programación para que puedan disfrutar de su propia experiencia, a la vez que facilitar a sus cuidadores una mayor autonomía para participar en el festival.

         Precisamente este enfoque para todos los públicos ha sido destacado por Miguel Méndez, quien ha explicado que se trata de una cita de carácter diurno, con diferentes niveles de confort para los alojamientos según las necesidades y preferencias de cada persona o familia, desde alojarse en tiendas de campaña, en furgonetas, en los bungalows del camping, o en una zona de camping de lujo, o ‘glamping’ especialmente preparada para la ocasión. También es posible elegir entre participar todos los días o en parte del Festival, con un mínimo de dos jornadas, o llevar comida propia para que sea más asequible para las familias. Cómo adquirir las entradas, aún disponibles, y la información completa de la programación puede consultarse en www.luzdelsur.es.

         Por otra parte, la organización ha explicado que no aspira a que esta cita se convierta en un evento multitudinario, sino que se concibe como un pequeño festival más proclive a compartir experiencias y favorecer el crecimiento personal y la consciencia, “con más de 500 o 600 personas se perdería la esencia”, ha afirmado Méndez. El año pasado registró una afluencia media de 238 personas por día, y este año la organización espera llegar a las 250, lo que permitiría mejorar aspectos del festival para el año que viene “y 

bajar los precios para hacerlo accesible a las personas”, ha recalcado el promotor del Festival.

            El alcalde ha encuadrado esta actividad dentro de una programación general en el municipio, con numerosas citas de interés: “San José del Valle se está convirtiendo en un centro donde iniciativas de este tipo de están consolidando”, y ha recordado que esta circunstancia se ve favorecida por el hecho de que la localidad se sitúa “en el centro geográfico de la provincia”. Además González Carretero  ha agradecido la colaboración de la Diputación como “aliada necesaria” para que se desarrollen estos eventos en el pueblo. Sobre el Festival ha destacado la belleza del paraje en que se celebra y su originalidad. “Es tan distinto que todos estamos deseando poder estar y celebrar esa semana. Te hace crecer como persona y como comunidad”.