CIPAEM 2018.
Artefactum.
En el siglo IV el emperador Constantino I convocó el Concilio de Nicea, en el que entre otras cosas de suma importancia, se condenaba la figura del clérigo ocioso llamado por aquel entonces "Vagans". Es probable que tengamos aquí la primera referencia a los más tarde se conocería como "Goliardo" o "Clerici vaganti". Estos personajes fundamentales en gran parte de la literatura europea del medievo, eram en su mayoría estudiantes que abandonaban sus órdenes eclesiásticas para llevar una vida irregular y errante.
Muchos de ellos servían a los señores de sus propios alumnos y llevaban en general, una vida licenciosa. En España, como ejmplo de goliardo, tenemos a Juan Ruiz, Arcipreste de Hita quien en su "Libro de buen amor" nos deja algunos versos al respecto:"...como dize Aristotiles, cosa es verdaera, el mundo por dos cosas trabaja: por aver mantenecia: la otra cosa era por aver juntamiento con fembra placentera..." // "...Es el vino muy bueno en su mesma natura, muchas bondades tiene si s'toma con mesura: al que demás lo bebe sácalo de cordura: toda maldad del mundo face e toda locura..."
En 1803 se descubre en Baviera un códice con cantos de los siglos XII y XIII, de contenido variopinto y singular: se mezcla en él cantos religiosos con cantos morales y satíricos, canciones de amor, a la bebida y al juego, a representaciones religiosas, parodias, etc... Este manuscrito se le atribuye a los Goliardos. En general estos cantos satirizan y critican todas las clases sociales de la época, sobre todo las que ostentaban el poder. En Goliardos, Artefactum quiere dar su particular visión de estos poemas, acercando al oyente a esa parte de la Edad Media, para nada oscura, y llevándolo al punto a alguna taberna de la Europa central.