Versiones de country, bluegrass y rockabilly en acústico, con una formación de voz, contrabajo, banjo, tabla de lavar y batería. Han ofrecido multitud de conciertos que se convierten con rapidez en fiesta salvaje vaquera al más puro estilo tejano. El nombre es un homenaje a las viejas películas de Burt Reynolds y a esa “American White Trash” del Sur de los Estados Unidos. Cuentan con un disco editado, ‘La Maldición de Wyoming’, al que antecedieron dos maquetas, “Country más mejor”, y “Fuera de la ley, dentro de los bares”.
Cercanos a los Cigarbox, algunos de los instrumentos que utilizan son de fabricación propia a partir de cajas de puros o latas.