Igor Stravinsky (1882-1971)
Petruchka (Ballet, versión 1947)
Claude Debussy (1826-1918)
Prélude à l’après-midi d’un
faune, L. 86 (1891-94)
Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791)
Sinfonía nº 31 en re mayor «París», K 297 (300 a) (1778)
Clásicos y modernos en París El segundo concierto de la Orquesta de París con la batuta de Mäkelä trae tres obras vinculadas con la capital francesa. Petruchka fue el segundo ballet que Stravinsky estrenó en la ciudad, tras El pájaro de fuego. Fue en 1911 y, como en el caso anterior, dentro de la temporada de los Ballets rusos de Diáguilev, convertidos entonces en uno de los grandes reclamos artísticos de la primavera parisina. Para el Preludio a la siesta de un fauno hay que retroceder a 1894, cuando Debussy presentó esta obra por completo rompedora, que supuso la auténtica entrada de la música del compositor en la modernidad (para muchos, es la obra que inaugura el siglo XX musical). Finalmente, se cierra con la Sinfonía que Mozart escribió en 1778 para el Concierto Espiritual de París en el transcurso de un viaje fatídico, ya que su madre, que lo acompañaba, falleció en la misma capital sólo quince días después de la presentación pública de la obra el 18 de junio