FESTIVAL DE GRANADA.
Un trío de imprescindibles.
Hay un estado de ascensión y comunión del alma con lo metafísico, con lo espiritual, experimentado por los grandes autores místicos de la historia de la literatura, y provocado por los grandes músicos de la historia del pentagrama. Es el público el que entra en ese estado sublime cuando se alinean los astros y acuden eso que los añejos llaman el duende. Hasta allí nos quiere llevar esta leyenda de la música, este mito del flamenco, que tiene de místico hasta las formas y los andares, y cuya sola presencia en el escenario ya es motivo de paz y de armonía. El maestro Jorge Pardo trae hasta las alturas del Auditorio La Chumbera esta dialéctica a tres sones compartida con la guitarra universal de Melón Jiménez y la percusión imprescindible de Bandolero.