Dos joyas sinfónicas unidas por el maestro Pablo González. Disfruta de la jovial espontaneidad de la Quinta Sinfonía de Schubert. En la segunda parte, la Cuarta Sinfonía, obra maestra de Brahms, destaca por su intensidad emocional, su riqueza temática y su desarrollo magistral de los motivos musicales.
FRANZ SCHUBERT (1797-1828) Sinfonía n.º 5 en si bemol mayor, D.485 (1816)
JOHANNES BRAHMS (1833-1897) Sinfonía n.º 4 en mi menor, Op.98 (1885)
Pablo González, director
Orquesta de Córdoba