Cantante, actriz, modelo, it-girl y, como la definió de manera tan bella como acertada el periodista Jorge Benítez en una entrevista, “prisionera feliz de la memoria de sus padres, los escritores Paul Auster y Siri Hustvedt”. Pero más allá de la inevitable herencia artie-genética, Sophie Auster ha encontrado en la música la aliada perfecta para exponer sus anhelos vitales. Y no lo hace nada mal: a Dogs and Men, su último trabajo, le han llovido comparaciones con Tom Waits y Billie Holliday. La hijísima se hace mayor.