Un trío originario de Juchitán, Oaxaca, capaz de fusionar de lengua zapoteca con música tradicional y efluvios vaporwave. Podría sonar estrafalario, pero realmente les funciona. ‘Trébol,’ el primer álbum de Valgur, era una obra cargada de pop demasiado puro que no satisfizo del todo a sus responsables. Tras años de trinchera, la banda empezó a trabajar en nuevas dinámicas que terminaron cristalizando en un disco titulado ‘Zapandú’ (2019), mezcla perfecta entre los sonidos del Istmo de Tehuantepec y las influencias del synth pop con las que ellos crecieron. Un sugerente cruce entre la tradición y la globalización. #folk-pop