El festival fue creado por la Delegación de Cultura del Ayuntamiento en 2002, con motivo del centenario de la fundación del Conservatorio Superior de Música que lleva el nombre del insigne pianista cordobés y como modo de homenajear la memoria del artista. Y ello, con un doble objetivo: contribuir a que el recuerdo de Rafael Orozco permanezca vivo en público e intérpretes y potenciar la imagen de Córdoba como punto de referencia en el mundo del piano.
La cita alcanza su décimo octava edición y contempla ocho conciertos en el conservatorio y dos en el Gran Teatro