El éxito de YO SOY RATÓN tiene que ver con su apuesta por romper los patrones habituales de lo infantil.
Sus canciones retratan situaciones cotidianas desde la óptica de los más pequeños (sus conflictos con el mundo adulto, sus retos, sus ilusiones…) Letras que provocan en mamás y papás urticarias, sonrisas y meditaciones.
La banda ha enamorado a mayores y pequeños con un nuevo concepto de música que se esconde detrás de estribillos aparentemente irreverentes y escatólogicos como el de “CACAAAA, ME ESTOY HACIENDO CAAAACA”.
Ahora la propuesta va más allá y se extiende por las casas en confinamiento de medio mundo con una nueva versión de la canción en 6 idiomas distintos (italiano e inglés + euskera, gallego, catalán y castellano).