A María le encantan los cuentos, historias y aventuras que le narra su abuelo, con el que pasa todas la tardes jugando a ser Peter Pan. Pero, una noche, los Niños Perdidos se la llevan al País de Nunca Jamás y será entonces cuando Campanilla, los piratas, los indios y todos los personajes creados por James Matthew Barrie pasen a formar parte de su realidad.
Un cuento de ahora y siempre que se centra en el vínculo entre abuelos y nietos. Un espectáculo que estimula la idea de no dejar de soñar, porque solo quien sueña aprende a volar…