JABETÍN TEATRO
En un Reino muy, muy lejano una anciana mendiga llamó una noche de invierno a las puertas de palacio. El príncipe que en él vivía, altivo y egoísta, la echó sin darle cobijo ni alimento. Por tal malvada acción, la anciana, en realidad una gran hechicera, bajo un conjuro a todo el Palacio encantó. Al príncipe lo transformó en una vulgar Bestia, al ama de llaves, al mayordomo…en estatuas los convirtió. Tan solo una Rosa Mágica era el testigo del hechizo.