El Museo Picasso de Málaga ha programado unos talleres de verano para los peques de la casa que se desarrollaran durante el mes de julio. Han llegado las ansiadas vacaciones y con ellas el tiempo libre. Pero hay formas muy divertidas de seguir formándose. Un buen ejemplo son estos talleres dirigidos a niños de 4 a 15 años en los cuales a través de amenas actividades se acercarán a la figura del artista Louise Bourgeois y Picasso, especialmente a su forma de trabajar la escultura y la pintura. Partiendo de estos dos géneros, conocerán cada día una técnica distinta, emulando a ambos creadores en su afán de experimentación, el uso de materiales no tradicionales y la simultaneidad de lenguajes artísticos.
Estos talleres forman parte de la programación de actividades paralelas a la exposición “Louise Bourgeois. He estado en el infierno y he vuelto” y pretende dar a conocer la figura del artista, la importancia de su obra y las similitudes que tenía con el pintor malagueño Picasso. Bourgeois nació en Paris en 1911, en el seno de una familia acomodada que regentaba un taller de restauración de tapices medievales y renacentista. A lo largo de su vida, trabajó diversas técnicas y materiales abordando temáticas muy dispares como la memoria, la maternidad y la frustración entre otras. Una constante en su obra son las formas orgánicas emocionalmente agresivas que hacen referencia a la vulnerabilidad del ser humano y su necesidad de protección en un entorno amenazante y perturbador.