Edad recomendada: a partir de 5 años.
A través de la audición podemos conocer y reconocer ambientes sonoros, sin percibirlo visualmente. Con este taller se invierte la idea de “escuchar lo que vemos” por “ver lo que escuchamos”, a través de una actividad didáctica y participativa en la que los asistentes podrán ver su propia voz y crear imágenes a través del sonido.