40 FESTIVAL DE TEATRO DE MÁLAGA
¿Quién no soñó alguna vez con darle un mordisco a la Luna? Este es el deseo de los animales de este cuento. Solo quieren probar un trocito pero, por más que se estiran, no llegan a tocarla.
Esta es una historia de deseos que parecen –a primera vista– inalcanzables, como la Luna, pero que consiguen hacerse realidad gracias a la colaboración. Una ayuda mutua de la que son partícipes los más variados animales. A medio camino entre la fábula y la leyenda, este relato ofrece una poética moraleja que habla de generosidad, solidaridad y sueños compartidos.