Si la maleta se abre porque te llama,
y los caminos se despliegan bajo tus pies,
y el espacio sideral se empequeñece,
y te salpica la música del mar…
Es porque has emprendido El Viajecito.
Entonces tienes que llegar a todas partes
y regresar a casa con los bolsillos llenos de aventura.
Una niña no puede salir a jugar al parque porque está lloviendo. Intenta hacer todo lo posible por divertirse. Busca a su muñeco favorito, Pepe, un dragón de trapo, para jugar con él. Pero se aburre. Cuando su desesperación es incontrolable, del cielo de su habitación, surge algo mágico: una maleta aterriza con un paracaídas. La niña sorprendida indaga, y en cuanto sostiene la pequeña maleta con sus manos, ésta empuja a la niña hacia un viaje inesperado, junto a Pepe. Pero un viento huracanado surge del interior de la maleta, el dragón desaparece, y la niña decide ir a buscarlo. Entonces emprende su viaje, ayudada por la maleta, la magia y su imaginación.