El reino de Kikú es su hogar, sus ‘cuatro paredes’, un lugar donde la imaginación convierte cualquier objeto cotidiano en un juego. Cualquier elemento se transforma en un universo cuando Kikú lo mira. Pero el ‘reino de las cuatro paredes’ está en peligro. El tiempo de los relojes se derrama sin parar y el ajetreo del día a día hace que todos los seres vivientes de la imaginación de Kikú se hayan escondido.