Teatro de los Claveles
Érase una vez, en un bosque no muy lejos de aquí, se hallaban dos hermanos, Hansel y Gretel. Un día, su padre y su madrastra los llevaron al bosque con la intención de abandonarlos. Pero Hansel, que era muy espabilado, fue dejando un rastro de piedras blancas. Y así, cuando se encontraron solos, siguiéndolas, pudieron volver a casa, algo que no agradó a su madrastra que, al día siguiente, los volvió a mandar a recoger leña con su padre. Pero esta vez, previsora, guardó las piedras de Hansel y no pudieron volver porque las migas de pan que, a falta de piedras blancas, fue dejando en el camino, se las comieron los pájaros. Perdidos en el bosque, encontraron una linda casita toda de chocolate, rellena con una malvada bruja.