Los payasos Coscorrito y Cuchufleta presumen de “queruditos” y eruditos, de listos y tontos. Con tonterías y bofetadas, disparates y payasadas cuentan el clásico cuento de “La Ratita Presumida”, entrelazándolo con el de la “Ratita Blanca”, también de Charles Perrault, para llegar a a resolver el misterio de quién hizo que la Ratita Presumida encontrara una monedita de oro…