Seguimos afirmando: Los sacamos con una cadenita de paseo, los enjaulamos, experimentamos con ellos, los explotamos, los cazamos, los cocinamos, acabamos con sus hábitats, los extinguimos, los abandonamos… Y encima, cuando queremos insultar, sin el menor reparo, vociferamos: ¡burro!, ¡reptil!, ¡cerdo!, ¡buitre!, ¡perro!, ¡besugo!, ¡víbora!… ¡animal! ¡QUÉ INGRATOS, VERDAD!
“Dominan el lenguaje gestual y las claves de la comedia… instalan la sonrisa en el patio de butacas desde el primer número… la obra mantiene un ritmo fluido gracias a la maestría y el manejo de los tiempos de lo que hacen gala Antonio Blanco y José Antonio Aguilar, dos cómicos con estilo propio.”
El Correo de Andalucía. Dolores Guerrero 8-2-21
“Dos maestros del humor que siguen con la capacidad de meterse en el bolsillo a los espectadores… se han convertido en referencia del humor absurdo y gestual…famosos e imprescindibles en la historia del teatro andaluz.”
Diario de Sevilla. Javier Paisano 8-2-21