De Federico García Lorca. Compañía Teatro del Norte.
Don Perlimplin es un teatro de monigotes humanos que empieza en burla y acaba en tragedia.
Dramaturgia y Dirección: Etelvino Vázquez. Interpretes: Cristina Lorenzo, David González. y Etelvino Vázquez.
Perlimplin es farsa y tragedia, es candoroso y lascivo, bufo y lírico, grotesco y sublime. Los elementos de la tradición popular aparecen fundidos en un delicado equilibrio con los procedentes de la más refinada cultura literaria. Partiendo del mundo cómico, habitual de la farsa, la obra va derivando hacia un simbolismo enigmático y llega a un desenlace de tintes rituales, erótico-religiosos.
Básicamente, el tema de Amor de don Perlimplin con Belisa en su jardín es el amor, pero un amor cómico, lírico o trágico, sin que un aspecto anule al otro, sino que solamente lo suplante en el momento preciso. “Don Perlimplin es el hombre menos cornudo del mundo – dice Lorca –, pero su imaginación dormida se despierta con el tremendo engaño de su mujer, pero él luego hace cornudas a todas las mujeres que existen”.
Perlimplín es un alma bellísima que reside en un cuerpo decrepito, de “monigote sin fuerzas”. Por el contrario, Belisa no es más que un cuerpo esplendido vacío de espíritu. Cuando Don Perlimplin se suicida, asesinando en él al joven, las dos personalidades que ha venido representando se funden, y el personaje agonizante que Belisa sostiene en sus brazos es a un tiempo el Joven y el Viejo. Perlimplin ha conseguido ser amado por un instante y Belisa ya tiene un alma. El amor lo puede todo.
Espacio escénico y atrezzo: Carlos Lorenzo
Vestuario: Manuela Caso
Música original: Alberto Rionda
Iluminación: Rubén Álvare
Fotos: Rafa Pérez
Diseño de cartel y programa: Jorge García Rodríguez Galván
Maquillaje y peluquería: Gloria Romero
Grabación en video: La Huella
Producción: Teatro del Norte