ANEMOI, es una pieza inspirada en los recuerdos del mar y en las sensaciones táctiles que pueden producir la luz del sol, el viento y el agua sobre la piel, que se hace especialmente emocionante para los urbanitas que gozamos de esta visión, con suerte, una o dos veces al año. Un ritual que nos renueva y que identificamos con el descanso y los momentos alegres de la vida.