CIA.CENTRO DRAMÁTICO NACIONAL
Bajo la dirección de Ricardo Iniesta.
Como el propio Ricardo cuenta cuando dirigió por primera vez este texto nos encontrábamos en una España más naif, más ilusionada, que entraba en la UE... Hoy es más, tenebrosa, siniestra, inquietante y perturbadora. Esto influye en el modo de ver el espectáculo. Y nosotros tenemos más experiencia. Carmen Gallardo fue actriz revelación por su papel del Niño muerto; hoy no necesita polvos de talco en el pelo, añade.
Ahora nos encontramos ante un montaje "que no tiene nada que ver" con el primero, en el que el elenco ha crecido en número -de seis a nueve actores de cuatro generaciones- y en formación gracias a los talleres recibidos por el Centro Internacional de Investigación Escénica TNT que Atalaya creó en Sevilla en 2008 y "al poso de la experiencia" de múltiples representaciones y giras por 37 países con obras como Marat/Sade, Madre Coraje, La Celestina o Ricardo III.
En esta trayectoria, Lorca se ha convertido en una de las cuatro columnas en las que se sustenta Atalaya, autor que Iniesta ha reivindicado como quien podía haber sido uno de los grandes dramaturgos de la historia mundial si no nos lo hubieran arrebatado; para la literatura española y mundial es un tragedia lo que le hicieron en Víznar.