Obra estructurada en dos actos en los que se proyecta “una típica relación de dependencia” entre Ana I y Ana II, dos seres del lumpen que desarrollan una serie de juegos, no exentos ni de crueldad ni de ternura, para sobrevivir la abyecta situación de explotación a la que han sido reducidas por “él”, personaje presente por ausencia. Con cruel deleite, las dos Anas —que bien podrían ser niñas o mujeres— recrean situaciones en las que se humillan, se enternecen, se aborrecen, se complementan intercambiando alternativamente los papeles de opresora/oprimida, reina/esclava.
Mariela Romero. Nacida en 1949. Pertenece a una familia de actores y su vida ha estado siempre ligada al teatro. Es una clásica contemporánea de la dramaturgia venezolana. Con su obra, que se aproxima al teatro del absurdo, lanza a sus personajes femeninos buscar nuevos patrones que les permitan ocupar su propio espacio en la sociedad, asumiendo las consecuencias que ello conlleva en lo que llamaríamos ahora un proceso de empoderamiento. El hecho de que sus personajes sean capaces de seguir luchando por muy abyecta que sea su posición le ha valido a su teatro el calificativo de ‘liberador’. Premio Nacional de la Crítica de Venezuela en 1980 con la obra El juego.