Un corazón envasado al vacío, una canción de Rita Pavone y una pareja improbable. Quizá deberíamos pararnos a pensar que damos por sentadas demasiadas cosas a nuestro alrededor.
Existen más planetas en el universo que todos los granos de arena de la tierra juntos y sin embargo, la posibilidad de que en ellos exista vida capaz de experimentar y construir sentimientos y emociones se reduce hasta el extremo de la excepcionalidad. Exploramos los múltiples sentidos de la palabra corazón junto con la dimensión real y cotidiana de las emociones, esquivando con una poética escénica muy precisa y deliberadamente atípica la “melodramatización” de las relaciones y la exposición dramática de los sentimientos.