Una idea de Pol Jiménez para el proyecto La Tacones DE Ana Pérez.
Una cronexión es una improvisación cronometrada en la que los artistas no han improvisado juntos anteriormente e incluso en la mayoría de los casos, ni siquiera se conocen. La improvisación dura 30 minutos exactos, de tal forma que cuando suena el cronómetro, aunque sea el momento más bello de la improvisación, se tiene que parar. Esta limitación del tiempo en los artistas, genera una situación de alerta que les hace estar muy presentes en escena conectando con el público, que a su vez, también está a la expectativa de no perder detalle.