Con BLANCA PORTILLO
La actriz ha recibido con esta representación el quinto premio Max de las Artes Escénicas en su carrera.
En este relato sobrecogedor Colm Tóibin da voz a María, una mujer desgarrada que, tras la violenta muerte de Jesús, rememora los extraños y convulsos acontecimentos que le han tocado en suerte. Aquí quien habla no es virgen ni diosa, sino una madre judía, ciudadana de un extremo del imperio romano donde aún alientan ritos helénicos, convencida de que su hijo se ha dejado corromper por nefastas influencias políticas. Sola y exiliada, nostálgica de su marido y de una época de calma y seguridad que de pronto quedó destruida por la implicación de Jesús en disturbios, aparentes sanaciones milagrosas y confabulaciones que acabaron con la crucifixión del hombre que había llevado en sus entrañas, María recuerda y habla.