PASCAL RAMBERT / BUXMAN PRODUCCIONES.
En esta nueva pieza, Pascal introduce al espectador en una sala de ensayos, como si de un voyeur se tratara. En ese espacio íntimo trabajan dos actrices (María Morales y Fernanda Orazi), un director de escena (Israel Elejalde) y un escritor. Uno tras otro toman la palabra y encienden una llama devastadora que no se apagará hasta que las palabras descubran la tarea precisa que se les ha asignado.
Cuatro amigos, dos parejas que se citan para ensayar su nueva obra, sobre Stalin y el comunismo, con Chejov al fondo. Trabajan juntos desde hace tiempo, tienen un pasado lleno de vivencias y deseos comunes que los une y les da identidad. Un grupo, una “estructura”, una familia que se ha elegido a sí misma.
Uno tras otro, nuestros cuatro protagonistas expresan su opinión sobre la vida, el amor, la amistad… Este pequeño grupo explotará inexorablemente ante nosotros. El primero que toma la palabra lanza una salva incendiaria porque no le convence la deriva que está tomando el trabajo, lo que da lugar a que se active una máquina implacable que nos asoma a todos los abismos por los que caemos cotidianamente.