CIRCADA
Cía. EIA.
Si imaginas el circo desde lo sutil, como un objeto mágicamente suspendido en el aire, puedes, perfectamente, imaginar Espera de EIA. Espera es una caricia circense, una brisa acrobática en la montaña, o en un lugar lejano, idílico y rural donde viven sus protagonistas. Un lugar al que asomarse a través de una puertecita, hasta que, poco a poco, nos vemos completamente dentro de él. Estamos ante una pieza en la que las fronteras se diluyen: el artista y la persona, el circo y lo “normal”, lo extraordinario y lo cotidiano, el público y la compañía. Espera es una invitación a entrar, a veces físicamente, en un universo particular, a sentir la respiración y la mirada de los acróbatas o participar en sus portes.