Lola, camarera sevillana, aguanta como puede a los borrachos de turno contando retazos de su vida mientras ve pasar el despecho de su último hombre.
La humillación le hace blasfemar.
Para su sorpresa una fantasmal aparición responde y le reprende.
Y lo que cuenta Macu, es la traslación al mundo del ritual litúrgico de las penas de Lola, su visión realista de los mitos religiosos, desenmascarando la hipocresía capillita y planteando necesidades absolutas desde el punto de vista de la mujer.
Dos mujeres que sueñan, que empiezan a hacerse amigas y este encuentro será iniciático. La magia de la noche se encargará del resto.