Compañía TÍTERES DE MARÍA PARRATO
Porque algo tan habitual en un obrador como hacer unas madalenas se puede convertir como por arte de magia en una manera de contar historias, propias y ajenas. Cuando los objetos usados en su elaboración se trasforman en gallinas obedientes y trabajadoras y la cocina en un corral. Cuando la zorra acecha y el gallo vigila mientras las gallinas producen y crían. Todo puede pasar pero lo único seguro es que las magdalenas Parrato se comen mejor en el momento.