El Ayuntamiento de Estepona informa que el Auditorio Felipe VI acogerá el próximo sábado, 6 de noviembre de 2021, la representación de la obra teatral ‘La fiesta del chivo’.

Protagonizada por Juan Echanove, esta producción de ‘Okapi Producciones’ adapta una de las obras cumbres de la narrativa del Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa.

La obra, que dará comienzo a las 19.00 horas, está basada en hechos reales y recrea la vida del ex dictador de la República Dominicana, Rafael Trujillo.

La pieza, recomendada para mayores de 14 años, está dirigida por Carlos Saura, uno de los grandes directores del cine español e interpretada por unos actores en estado de gracia liderados por Juan Echanove.

‘La fiesta del chivo’ es “una lección de vida, que nos recuerda que el valor y la dignidad son los únicos antídotos contra la maldad y la barbarie”, según explica la compañía, responsable también de uno de los grandes éxitos recientes de la cartelera teatral: la adaptación de la novela ‘El coronel no tiene quien le escriba’ de Gabriel García Márquez.

La obra de Vargas Llosa es uno de los títulos fundamentales de la historia de la literatura contemporánea en lengua española. “Trujillo es un personaje fascinante. Gobernó la República Dominicana durante más de 30 años con una crueldad y megalomanías nunca antes vistas, pero también con una inteligencia que lo hacía deshacerse de todos sus enemigos para mantenerse en el poder”, señalan desde ‘Okapi Producciones’.

El ambiente que se recrea en la obra es el de la alegría del Caribe, con su luz, su vegetación exuberante, sus músicas de bachatas y merengues y las interminables fiestas de la jet internacional en los jardines del Hotel Jaragua. Y a la vez se mezcla con la oscuridad tenebrosa de la prisión de ‘La Cuarenta’, donde se torturaba a los prisioneros sospechosos de traición al régimen, mientras la niña protagonista vivía una infancia feliz ajena a cuanto sucedía a su alrededor.

El texto escrito para esta adaptación apuesta por la sencillez de la trama, manteniendo la tensión hasta el inevitable y presentido dramático desenlace final, e introduce además algunos elementos de humor propios del esperpento “valleinclanesco” que aligeran la dureza de la historia que se narra. Y todo ello, en un estilo ameno y directo que se mantiene fiel al riquísimo lenguaje que caracteriza la obra del maestro Vargas Llosa.