de Isabel Vázquez
Se trataba de no ser una mujer. Me impusieron ser un hombre, como un deber, o lo que es lo mismo y por eliminación, el no ser una mujer. Como si la peor suerte existente para un hombre fuese ser eso, una mujer. Y tuve que aprender lo que es ser un hombre y tuve que aprender lo que es ser una mujer.
Este proyecto nace de una reflexión, a veces divertida, a veces sarcástica, siempre emotiva, de por qué a los hombres les cuesta tanto mostrar sus sentimientos.
Intérpretes y coreografía: David Barrera, David Novoa, Arturo Parrilla, Javier Pérez, Baldo Ruiz, Indalecio Seura. Con la participación de Javi Ruiz y Álvaro Copado
Textos: Max Arel Rafael
Dramaturgia: Gregor Acuña-Pohl
Idea original, Dirección Artística y Coreográfica: Isabel Vázquez