El espíritu rebelde y enérgico de una joven recién llegada al mundo laboral, se contrapone al conformismo y la estabilidad de una mujer de más de cuarenta años, madre de dos niños. Juventud frente a madurez. En situaciones límites las relaciones humanas dejan a un lado las máscaras y sacan a relucir la verdadera naturaleza del ser humano, como individuo que lucha por la supervivencia.