Boabdil, es visitado en su exilio en Fez por Muhammad Al-Arabi, un amigo poeta con el que escribió su última carta en Al-Ándalus, la famosa Risala (La Carta), dirigida al sultán de Fez, Al Wattasi, con el fin de que lo acogiera en su exilio.
Boabdil, en este encuentro recorre su vida y sus sentimientos, desde lo más profundo de su ser, abriendo las puertas a sus secretos más oscuros.