En “Me cuesta tanto olvidarte”, las canciones son el reflejo de la eclosión que se produjo en Madrid en los años 80, donde transcurre la acción, coincidiendo con el movimiento que se dio en llamar “Movida Madrileña”.
Las referencias al momento y lugar son constantes en toda la representación, sin olvidar un aspecto social de la época, como fue el incremento del consumo de heroína entre la población juvenil. Dos chicos de pueblo cargados de ilusiones y que ven en Madrid la ciudad donde vivir para cumplir sus sueños, que no son otros que crear un grupo y alcanzar la fama.