Manuel Liñán
Pie de hierro es un duelo, una conversación vehemente con la tradición. Quiero dar respuestas a mi inconformidad y generar nuevas preguntas para mi futuro. Un espectáculo que a pesar de la violencia y la rebeldía busca el abrazo humano del entendimiento, el calor sincero de los brazos que se encuentran.
Donde no hubo palabras, habrá baile. Donde no hubo baile, habrá palabras. Donde no hubo fe, habrá silencio. Donde no hubo silencio, habrá pie de hierro.