Una noche de flamenco cara a cara con la afición en alguna calle de La Isla.
La Piriñaca es alegre y lo refleja su forma de ser, de andar, de vestir, de festejar. La Piriñaca, es de aquí, tiene los pies en el fango, nutriéndose de su tierra. Luce un traje de algas marinas con ribetes de salicornia.